Por la mañana, mientras sufro los atascos para recorrer el camino para el puesto de trabajo, siempre entre parada y parada, mis ojos se fijan en situaciones cotidianas que parecen pasar desapercibidas de nuestras vidas y forma de pensar; son muchas las ventanas, que tienen estas siluetas detrás de sus cristales, contemplando un nuevo día.
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2 comentarios:
Me encanta Soledad, un precioso homenaje, y el nombre muy apropiado, pues es un sentimiento muy común en nuestros mayores por desgracia... me alegra muchísimo ver otro nuevo trabajo, se nota que las musas han vuelto por fín de las vacaciones!! besos
Gracias Paky, ya estamos nuevamente en marcha.
Besos
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